El color es el fenómeno físico que produce la luz cuando los ojos la captan y perciben, y es interpretada por el cerebro. Este fenómeno físico es transmisor de sensaciones y significados.
El color está presente en nuestra vida de forma directa, pues continuamente lo estamos percibiendo. Esta percepción del color produce en nuestro cerebro diferentes sensaciones en función de cómo se combinen esos colores.
Para crear esas emociones y sensaciones, los colores se combinan en función de la armonía y el contraste, produciendo imágenes más o menos agradables a la vista.
Aquí podemos observar dos imágenes que utilizan colores complementarios para dar contraste y así producir diferentes sensaciones:
En cambio, en esta otra imagen el pintor utiliza colores equidistantes para producir un contraste más perfecto:
Otros colores, en función de la combinación, pueden evocar distintas sensaciones térmicas:
Se puede observar claramente cómo los colores pueden influir en las sensaciones, y que las personas asociamos los diferentes colores con sentimientos o valores, por ejemplo, el rojo la pasión, el azul o el blanco la pureza y tranquilidad, el verde con la naturaleza, etc.
Cuando hablamos del color y su psicología, es importante destacar que no todas las personas van a ver y sentir lo mismo. Es muy importante la subjetividad del que ve.
Todo esto se utiliza para crear un lenguaje visual con el que comunicar algo; se denomina semiótica del color. Los colores expresan estados anímicos y emocionales de muy concreta significación psíquica, también ejercen acción fisiológica.
"Quien nada sabe sobre los efectos universales y el simbolismo de los colores, jamás podrá emplearlos adecuadamente". Eva Heller
No hay comentarios:
Publicar un comentario